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jueves, 23 de septiembre de 2010

A mi madre querida



FOTO: Rosa María y su madre Encarna

El día que tú naciste, nació la vida.
Que a cada paso que dabas.
Cada lágrima que derramabas nacía una vida.
Nueve lágrimas de alegría.
Nueve hijos que entre tus brazos crecían.
Nueve estrellas que alrededor de su madre se movían.

Siempre estás ahí,
siempre que te necesitamos nos arropas
con tus brazos para calmar nuestros llantos.

Madre que la vida nos dio.
Madre que queremos con todo nuestro corazón.
Que nos llena de alegría,
con su sonrisa,
que sufrimos cuando sufres,
que reímos cuando ríes,
que lloramos cuando lloras.

Madre del alma,
madre querida,
madre que nos dio la vida.

Siempre tendrás quien te quiera.
Siempre tendrás a tus hijos que darán
la vida por una sonrisa, por una mirada,
por un abrazo de su madre amada.

Y solo podemos decirte con todo nuestro cariño
¡Gracias mamaíta del alma!
Por lo buena que siempre has sido.
Perdón por el daño que te causamos
y por lo que has sufrido.
Te queremos mamá.

Esta poesía escrita por mi sobrina Rosa María Rodríguez,
es un himno de amor y agradecimiento hacia su madre Encarna
una de las personas más dulce y maravillosa que pisa
la faz de la tierra.

1 comentario:

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