Como un arroyo que corre
entre maleza y recuerdos
sin rumbo ladera abajo
iba pasando mi tiempo.
Viví días sin sentido.
Noches de escarcha y
lamentos.
Navegué en la depresión
sin poder llegar a puerto.
Mas ahora todo es
distinto,
ya no duelen los
recuerdos.
Mis noches ya tienen luz
mis días un rumbo nuevo.
Mi vida vida se
complementa
con amor, con
sentimientos,
con tres preciosos retoños
que Dios me ha dado por
nietos.
Mi nieta Noa, mi tesoro,
la princesa de mis sueños
tiene cabellos dorados
y ojos color de cielo.
Una ternura infinita
que cubre todo mi anhelo
cuando me mira a los ojos
y dice.... te quiero
abuelo.
Después como un
torbellino
que envuelve miles de
besos
nació mi precioso Axel
el príncipe de mi reino.
Con su sonrisa de ángel
que borra malos recuerdos
y unos ojos que enamoran
tan azules como el cielo.
Y ahora una buena nueva
abraza mi corazón
hace apenas tres semanas
que nació mi nieto Lion.
Mi alma se llena de vida
sus ojos de luna clara
mis labios tiemblan de
amor
cuando contemplo su cara.
Y le doy gracias a Dios,
Y le doy gracias a Dios,
a la vida, al universo,
a mis hijas y a mis yernos
por darme estos tres
luceros.
Que son mi vida, mi amor,
mi razón, mi fundamento,
la luz que alumbra mis
noches,
mi corazón y mis besos.
En infinito me alegro
que roben todo mi tiempo
cuidarlos con gran amor
poder ejercer de abuelo.
Tan solo resta pedir
a ese Dios que esta en el
cielo
que les trate bien la vida
y a mi... me permita
verlo.